Manizales / Natural Products Doctor Red
‘Tu cocina, tu medicina’ es una frase que suelo repetir constantemente a los pacientes que asisten a los planes de bienestar en los Parques de la Salud; también a quienes asisten a las conferencias que dicto y a quienes ven el programa Conexión vital. Hoy te la comparto a ti, pues es crucial que comprendas que en tu alacena y nevera está la fórmula para mantener tu organismo en las mejores condiciones.
Es fundamental para ti la forma en que preparas los productos que consumes y la cantidad de lo que ingieres. El origen de tus alimentos debería ser lo más natural posible: opta siempre por lo orgánico, aléjate de lo que esté tratado con químicos.
Como médicos, nos enseñaron muy bien farmacología, pero siento que lo primero que debería haber en la fórmula es qué alimentos consumir para evitar agudizar un cuadro médico.
Tienes que saber que el cuerpo vibra con la comida: Si la comida mala te enferma, la buena te alivia. No se puede abordar a un paciente, sin tener el manejo nutricional adecuado.
Y en ese manejo es importante el papel que cumple el fogón de tu hogar. El paso de los alimentos por el fuego, está causando muchos problemas a tu cuerpo. Cuando sometes las preparaciones a un tiempo superior al que se debiera, les quitas todas sus propiedades y así los beneficios que otorgan.
El brócoli, por ejemplo, es un vegetal rico en vitaminas y minerales que -con un exceso de fuego (más de 2 minutos)- pierde su acción frente a la prevención del cáncer y ante la enfermedad misma. Si lo picas bien menudo (como el cilantro), expones su molécula sulforafano, esencial para ayudar a personas con esta condición.
Es muy importante que aprendas a controlar el tiempo de fuego para tus alimentos y que ingieras también, en su forma natural, aquellos que así lo requieran. Si no consumes crudo, si no vas a la huerta, tu cuerpo entra en deficiencia de la tabla periódica. Debes encontrar el balance, no excederte.
En acero, siempre
Las preparaciones al vapor son excelentes aliadas para que no le quites las propiedades al brócoli y a cientos de productos de la naturaleza. En eso te pueden ser útiles las ollas de acero quirúrgico. Evita las de teflón, las esmaltadas, las de aluminio; este último con efectos muy negativos en tu salud.
Es que hay elementos que el cuerpo no puede procesar y que, acumulados, hacen que desarrolles no solo cáncer, también Párkinson, Alzheimer, diabetes, hipertensión, cirrosis, entre otras tantas patologías que te llevan a la muerte.
El acero, además, es un excelente conductor del fuego, lo que minimiza los tiempos que pasan los alimentos al calor. Así tienes menos posibilidades de que las preparaciones pierdan sus cualidades y ahorras en el consumo de gas o energía eléctrica. Hace una distribución uniforme del calor.
Al acero quirúrgico, que es inoxidable, se le hace un proceso especial para liberarlo de bacterias y otros compuestos. Materiales como el aluminio, el teflón o el esmalte, apenas comienzan su desgaste, facilitan la reproducción de múltiples microorganismos.
Las ollas de acero son consideradas superiores también por su alta durabilidad, es que hasta en el peso se ve la diferencia, si se le compara con las de otros materiales. Además, son fáciles de limpiar, siendo resistentes a las manchas.
Contact
Pregunta por las ollas de acero quirúrgico a Jhon Zuluaga, en el (+57) 311 605 3998. Allí se te dará una asesoría al respecto y se te aconsejará por la mejor forma de emplearlas para beneficio de tu salud. Recuerda que no es solo qué comes, sino cómo lo preparas.
* Con datos del programa Vital connection.