Manizales / Natural Products Doctor Red

 

Hoy te voy a resaltar la importancia del hígado como órgano vital, lo que hace en el cuerpo y lo crucial que es mantenerlo saludable. Está ubicado en la parte superior derecha del abdomen, debajo de las costillas; y su daño puede llevarte a la muerte.

Actúa como filtro, eliminando sustancias nocivas que no te dejan alcanzar el bienestar, para luego sacarlas, a través de la bilis (líquido que ayuda en la digestión de las grasas en el intestino delgado) o la orina.

Debes asimilar que el hígado procesa los nutrientes de los alimentos que consumes (proteínas, grasas, carbohidratos), para luego producir energía y otras sustancias necesarias.

El hígado también almacena glucógeno, que es una forma de energía; así como vitaminas y minerales. Ingerir los productos correctos, te llevará a mantenerlo en mejor forma. Ten en cuenta:

  1. Las verduras de hoja verde, como las espinacas, son protectoras. Diles sí a las ensaladas, que entre más colores tengan mejor es el efecto en ti.

 

  1. Frutas, especialmente las manzanas y las peras, pueden complementar tu tarea de cuidado hepático.

 

  1. El consumo de semillas, como las de chía o girasol, te facilitan la vida. También aportan los frutos secos, siendo las nueces las de más beneficio para tu hígado.

 

  1. No dejes de lado el pescado graso. En el salmón, la trucha e incluso en las sardinas, encuentras un potentísimo acompañamiento.

 

  1. El aguacate, el jengibre, la cúrcuma, el ajo y la cebolla no pueden faltar en tu alacena, si de cuidar este órgano se trata. Su composición es vital para su funcionamiento y sus efectos son de gran impacto.

 

  1. Incluye granos enteros, como el arroz integral y la quinua; o legumbres, como las lentejas y los garbanzos; para fortalecerlo.

 

  1. Utiliza aceites prensados en frío como el de oliva. Es nutritivo y, además, regula los niveles de azúcar en sangre.

 

  1. Bebe agua con regularidad, al menos 2 litros al día, para desintoxicarte. Súmale a ello el té verde, en tus tiempos de comida, para protegerlo aún más.

 

Apóyate y hazlo tranquilo

Es preciso que, a esa buena alimentación, la acompañes con actividad física. Nadar, trotar, bailar, son ejercicios de bajo impacto que podrían ayudarte. Asesórate de un profesional y elige la mejor opción para ti. Eso también aplica, si lo que crees necesitar es apoyo nutricional.

 

 

* Con información de Dr. Rojas en www.youtube.com.

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